La derrota de Israel en la Guerra de los Ocho Días limitó el poder militar sionista para las futuras guerras, y está claro que Israel no solo debe olvidar el lema "Nilo hasta el río Éufrates", sino que también debe reconocer el hecho de que los palestinos y los libaneses están ganando terreno.

Sayyed Hassan Nasrallah:

Los líderes enemigos dijeron que la guerra no terminaría hasta que Gaza suplicara. ¿Cuál fue el resultado? Israel suplicó, pero Gaza no cayó.